El Curandero De Las Montañas De Vallarta.

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El sanador de arcilla blanca.


En medio de la naturaleza, donde la magia de los amaneceres, los atardeceres y la noche sabia se mezclan para allanar el camino de la curación, vive David, un hombre que ha decidido en su última etapa distanciarse del bullicio de la vida moderna y adentrarse en la montaña entre los pueblos de Desembocada y Ranchito, allí mismo, en la montaña que alberga el río Mascota y una fuente termal dentro de Puerto Vallarta, creando un ambiente paradisíaco.

Para llegar hay que llegar al puente que divide los dos pueblos y luego subir por un sendero de arena que lo guiará para cruzar tres veces el río, aproximadamente 5 kilómetros hacia la montaña. Aunque la caminata es bajo el sol y con un río completamente lleno de rocas resbaladizas e inestables, es agradable escuchar la calma e interactuar con la magia de la naturaleza. Una vez que llegues a la fuente de agua termal podrás disfrutar de tres pozas de agua caliente o descender al río para templarte con agua fría.

A su lado, en medio de la paz y armonía de la montaña, se encuentra un hombre completamente cubierto de Arcilla Blanca, que se asemeja a los monjes yoguis de la India que protegen sus cuerpos del sol a través de la Arcilla que refleja los rayos y así evitan quemar su piel. Pero lo más magnífico de este noble caballero es su capacidad para curar hematomas, heridas, dislocaciones e inflamaciones. Es un quiropráctico perfecto que cura a través de su amplio conocimiento del funcionamiento glandular, muscular, de ligamentos y de órganos internos. También sabe de herboristería y medicina tradicional mexicana.

En la montaña, junto a la piscina de aguas termales, instala su mesa de trabajo, y en un cubículo construido con palos y bolsas negras, David trabaja en curar a quienes acuden buscando su ayuda, lo que tiene un costo de recuperación que va desde los $1500 a $5000 dependiendo de lo que se necesite sanar, ya que es importante que la curación sea una decisión libre y consciente que requiere sacrificio y compromiso real. Así que si quieres descubrir el paraíso y sanar tus dolores, busca a David, el Sanador de las Montañas de Vallarta.